Hoy les quiero compartir la receta de la brookie: una galleta accidental, inventada en el momento por falta de ingredientes. Me encantó tanto la galleta que tenía que compartirla con ustedes. Si tienen suerte, también podrán disfrutar de ese momento accidental. Sigue leyendo…
Los domingos en la tarde nos dan ganas de algo dulce. Así nos encontrábamos nosotros hace poco. Mientras disfrutábamos de un vinito y el atardecer prolongado, buscábamos recetas de galletas. Estas si, estas no—encontramos la galleta perfecta. Y nos movilizamos a la cocina, listos para cocinar.
No había chocolate chips.
¡Terror, desgracia, tristeza, depresión! ¿Qué hacer un domingo en la tarde-casi-noche, ya empiyamados, cansados de la semana y ansiosos por la que venía? Ni consideramos ir a buscar los chocolate chips (bueno, si fuimos…no había en el supermercado tampoco), ni movernos y abandonar a los perritos…era una tragedia.
De estas imposibles condiciones nació la brookie. Fue una galleta accidental, no la planeamos, no la concebimos. Surgió en el momento, como un pensamiento olvidado; bueno ni modo, ¿por qué no tratar?
10 cdas. de mantequilla con sal y fría
¾ taza azúcar morena comprimida
¼ taza azúcar granulada
1 huevo grande
1 ½ cdita. vainilla
1 taza harina (llena en cucharadas y nivelada; usa un cuchillo para nivelar)
2/3 taza cocoa
½ cdtia. soda
¼ cdita. sal
½ cdita. de café en polvo instantáneo
¾ taza nueces tostadas
1 ¼ tazas de chocolate chips blancas
En un tazón grande, mezcla por dos minutos los pedacitos de mantequilla y ambas azucares.
Agrega el huevo y la vainilla y sigue mezclando hasta que todos los materiales estén bien mezclados (calculo unos 30 segundos). Después de apagar la batidora (no la escondas que la vamos a volver a usar en el siguiente paso), podes usar una espátula para juntar la mezcla que se apega a los bordes del tazón.
Despacito (suavecito) agrega la harina, la cocoa, la soda y la sal. Usa la batidora para mezclar a una baja velocidad, hasta que todos los materiales estén bien mezclados.
Agrega los chocolate chips y las nueces a la mezcla. Te recomiendo que guardes unos cuantos chocolate chips y los coloques encima luego.
(Hoy si podes guardar la batidora.)
Podes usar un cucharón de helado para el siguiente paso. Debes crear pelotas de masa, cada una con unas tres cucharadas de tamaño. Cubri las pelotas de masa con papel de plástico y refrigéralas (desde 15 minutos a 48 horas).
Una vez listas para hornear, precalienta el horno a 350° F.
Hornea las galletas por 10-12 minutos, o hasta que sus partes superiores estén firmes. Es muy importante que no te pases de doce minutos; las galletas siguen cocinándose una vez fuera del horno.
Retira el plato del horno y deja las galletas enfriar por cinco minutos, antes de transferirlas a otro recipiente.
Disfruta.
Allí lo tenes. Una galleta que se parece a un brownie (por eso su nombre extraño), una galleta que no esperábamos, una galleta que nunca olvidaremos.